Terapia Cognitiva Conductual (TCC)
La TCC es denominada por Ma. Ángeles Ruiz, Marta Isabel Díaz y Arabella Villalobos (2012) como “una actividad terapéutica de carácter psicológico basada, sobre todo en sus inicios, en la psicología del aprendizaje. Actualmente parte de sus intervenciones están fundamentadas en la psicología científica, que pretende ser su punto de referencia”.
Entre las principales características consideradas por estos autores se pueden señalar las siguientes:
- Las técnicas y procedimientos utilizados en la TCC cuentan en una buena parte con base científica o experimental, sin embargo, también una proporción importante de los procedimientos utilizados surgen de la experiencia clínica (reestructuración cognitiva, hipnosis, relajación, técnicas paradójicas, etc.).
- El objetivo del tratamiento es la conducta, y sus procesos subyacentes, en sus distintos niveles (conductual, cognitivo, fisiológico y emocional), considerada como actividad susceptible de medición y evaluación (aunque sea indirectamente), en la que incluyen tanto los aspectos manifiestas como los encubiertos.
- El objetivo de la intervención es el cambio conductual, cognitivo y emocional modificando o eliminando la conducta desadaptada enseñando conductas adaptadas cuando éstas no se producen. Para ellos, la intervención también puede dirigirse a modificar los proceso cognitivos que están a la base del comportamiento (2012).